"Uno vive con la esperanza de convertirse en memoria.”
Antonio Porchia.
El humano se caracteriza por ser un animal que busca la trascendencia, el escape del mundo, de esta “realidad” material.
¿Y quien puede culparlo? Esta conducta esta totalmente justificada. La realidad siempre ha sido y será un gran enredo.
La realidad es una entidad observable, designada también por el termino “vida cotidiana” pero si mirás a tu alrededor no se la puede ver, no por que no este, sino por que es tan grande, que una milésima parte de su totalidad representa nuestra máxima visión.
Es hora de que amplíes tu horizonte y veas este inmenso desafío que es la vida. Solo hace falta que abras los ojos, pero los internos. Todo lo que creemos es estable y verdadero, solo son muletas, que vistas desde la totalidad de la existencia son inútiles. Quebralas y probá su falsedad!
Desde tu nacimiento fuiste marcado a fuego como ganado, tu psiquis recibió improntas tan profundas que marcaron el desarrollo posterior de tu vida. Desde la primera alimentación materna, hasta los impulsos sexuales, pasando por las nociones de territorio, odio, cariño, celos, diversión, etc. todo fue dado por el exterior. Fuiste marcado por uno de los innumerables tentáculos de la realidad.
El hombre esta así absorbido en un mar de ilusión. Vos estas atrapado en una jaula de conceptos. Para ver mas allá del “2+2:4” primero se debe pasar por mucho tiempo de sanacion. Reconstruir el estado original y sano de la mente, o sea el estado previo a ser marcados. Para lograr eso, es necesario el mayor de los sacrificios: CREER. Esta practica común en toda religión pasada, aparece nuevamente Hoy en día, donde la humanidad, esta aceptando las premisas axiomáticas del nuevo paradigma pero de manera errónea.
Meditación y mediación van de la mano. Ya no mas el fantasma en la maquina, si no la maquina como espíritu, ultimo mediador, que separa de cuerpos “incorrectos” y lleva a una plataforma de luz artificial.
A solo un clic de distancia podes hacer un download de una conciencia evolutiva.
A través de este camino mal tomado, de este espejismo tecnocratico, es cada vez mas difícil sentir, ver o oler a nuestro alrededor evidencia del mundo natural.
Imaginemos que vivimos en un holograma puesto sobre la verdadera planicie de la tierra, y este programa fuera infectado por una bacteria: llamada civilización. Cada vez que la ciudad crece, mas nos encerramos y mas difícil es ver detrás del velo. Incluso nuestra arquitectura se ha convertido en simbólica, nos hemos encerrado a nosotros mismos en el pensamiento abstracto. Autos, casas, oficinas, colegios, ropas, televisores, etc. Hay un virus que nos separa de lo que antes era nuestro mundo en pos de una existencia que ayuda en su ínfima medida al aumento del poder de los símbolos de bienestar, de lo que es “correcto” y del abstracto capital.
Lo peor es que todo esa inútil materia que dan como remuneración por nuestra inconsciente esclavitud la gastamos en mediatizar mas nuestra vida o en destruirla un poco. En vez de experimentar mas el mundo y descubrir su acertijo, preferimos ver lo que otros dicen que es real en una pantalla o salir de lo que nos imponen; en un camino de destrucción formado por botellas vacías y humo de drogas. Ya no tenemos mas una vida. Solo tenemos un “estilo de vida”. Una abstracción de ella basada en el sagrado simbolismo de la comodidad, el panteón de los arquetipos que gobiernan y evalúan a la gente y sus sueños. Los arquetipos mediáticos, o mediarquetipos. Mientras lees esto, la era de la información explota e implota, dentro y fuera tuyo.
PELIGRO!!! TU IMAGINACIÓN YA PUEDE NO SER TUYA.
A la par tecnológica, la cultura se sofisticó, ahora depende de las imágenes. Ya no es lo que sos, si no lo que pareces… Es un mundo que compra y vende solo basado en la apariencia.
Cientos de iconos y símbolos que estamos obligados a ingerir a diario nos inducen a una ilusión dentro de una ilusión, como esas muñecas rusas que hay una dentro de otra, dentro de otra.
Así nuestra psiquis colectiva se infecta de modas, tendencias, y hábitos, maneras de ver la vida e incluso una ilusión de “Totalidad” que destruye a todo lo diferente.
Ya no se pueden sacar las imágenes del concepto de realidad, por que la gente ama “la realidad de sus imágenes”. Estando en un sistema social basado en ellas, son el “pan nuestro de cada día” de los que viven dentro del sistema. Por ello, de aquello con lo que se alimentan sensorialmente es con lo que se programan. El humano urbano promedio, solidifica sus “marcas de ganado” a diario con la ingesta de impresiones similares a su paradigma de cotidianidad o realidad. Programas de televisión, por ejemplo, son útiles así para reforzar patrones de ideas y conducir a la humanidad al matadero espiritual.
Las telenovelas de la tarde son exactamente lo mismo para la vaca con la marca “debo ser deseada y tener problemas entre mis pretendientes” que lo que para el toro con la consigna “debo demostrar mi masculinidad” representa una pelea de box. Los programas de chismes, las modelos, los concursos o las noticias, no tienen relevancia simbólica para tu milenaria alma. Solo son mediarquetipos que succionan la verdad del mundo. Detrás de todo lo que es ilusión, nada se esconde, no hay tesoro que buscar, ni experiencia que ganar.
Pero no todo esta perdido, entre la falsedad esta diseminada la verdad. Pero cada vez ella esta mas lejos de la perdida visión de la humanidad. En formato de películas, música, y hasta publicidades, se esconden mensajes de gente despierta, para despertar a otra gente, pequeños fragmentos de verdad que usan la vía de la basura para entrar en la mente.
Hay también verdaderos arquetipos, siempre existieron, y aunque ahora estén en desuso, aun viven. Por ejemplo, la leyenda en si, es una entidad que los tiene. Ella oficia de reporte grabado en la memoria celular. Humanizando y explicando tal como un mapa, los temas recurrentes de la evolución del hombre. Horizontes en este mundo de sombras y trampas.
Pero incluso eso peligra en tan particular momento histórico, ya que hoy en día, un simple muchacho que con un chicle y un cable salva una situacion determinada con ingenio y entra dentro del arquetipo “Mc Gyver”, de la misma manera, cualquiera vestido de jean, con zapatillas de lona y un pañuelo en la garganta es un “rollinga”. Todos esos arquetipos desplazan día a día a lo originales y son uno de los mas claros indicadores de que algo no esta bien en el orden de las cosas.
Tomemos por ejemplo, el caballero, arquetipo representado en miles de civilizaciones, (basta con ver coincidencias obvias) ha existido en diversas formas, pero con los mismos cánones, el es una representación del espíritu que busca una misión, un bien, un horizonte, es uno de los mas importantes, ya que es sinónimo de proactividad.
Pero ahora el ya no existe, yendo de lo general a lo particular y de lo inductivo a lo deductivo, podemos ver que el ultimo bastión de la caballería fueron los pilotos de la segunda guerra mundial, después de eso, toda fuerza proactiva de la humanidad, se vio reducida a cenizas, solo leves representaciones y fantasmas mediáticos recuerdan lo que antaño era un arquetipo constitutivo de la humanidad. Acaso el mundo estaría tan dominado y la humanidad tan cómoda con su control de 500 canales si aun existiera la consigna no escrita de poder cambiar al mundo? Apuesto a que no.
Hoy en día, “la totalidad” y otras ilusiones, hacen creer a la gente que salir a combatir el mal en el mundo, que honrar los valores, que intentar cambiar las cosas, es una locura. Que el detener aquello que esta mal en contra de las conveniencias personales, no solo que es inútil sino que es estúpido. Hoy en día ya no hay nadie para heredar el manto del caballero.
Y este no es el único caso. Docenas de arquetipos que estuvieron siempre, se desvanecen día a día, dejándonos a merced de los medios, sus marcas y aquellos que los manejan.
Quien gobierne las metáforas gobierna la mente.
Y si te comparás mas seguido con un símbolo de cartón que con algo con profundidad espiritual, significa que estas adorando dioses fabricados, y estas desviándote del camino natural de las cosas.
Todo en la vida tiene su propósito, el hecho de luchar ferozmente por implementar o hacer posible ese fin, es llamado heroísmo. Cada héroe, tuvo que desprogramarse de sus falsos arquetipos, de sus condicionantes y de su túnel de realidad, para así poder ver su horizonte.
Un héroe de la televisión no puede ayudarte por que simplemente no esta conectado con la realidad interna de la humanidad. Ni Napoleón, ni Kennedy son entendidos en los grandes patrones de la humanidad. Héroes y antihéroes, dependiendo del punta de vista, para vos no significan nada.
Busca en aquello que perdura la clave para abrir los ojos nuevamente al mundo como lo hiciste una vez. Un héroe, se mueve mas allá de sus limites, se supera a si mismo, para representar un ideal, convirtiéndose en cierto punto en algo simbólico. De alguna forma, el heroísmo es el arte del sacrificio personal en nombre de algo mas, es resignificar todo el ser por un objetivo, logrando así la trascendencia, el ordenamiento de un arquetipo, permite a tu mente descomprimirse continuamente, y reconstruirse en patrones mas altos de actividad, mas allá de todos los condicionantes de bien o mal, de blanco, negro, pobre, etc.
Para acompañarte en tu camino, tenés que elegir y conocer tu origen legendario.
Recordar que sos parte de un anciano y sagrado progreso de continuo aprendizaje. Esta automitologia será tu guía para cuando te separes de los confines de la realidad mediatizada que te obliga a moldearte. En una civilización de Maradonas, atrevete a ser un Teseo. Aquí esta la clave para después encontrar tu propio camino.
Roy Khalidbahn